LA IMPUNIDAD HACE DAÑO A OAXACA,MEXICO

Rigoberta Menchú Tum, Premio Nobel de la Paz, visita la entidad como una etapa de su gira para promover la democracia en América Latina. Sobre Oaxaca, pidió investigar las violaciones a los derechos humanos, para encontrar la paz y la reconciliación.

.. Impunidad e injusticia, problemas de Oaxaca, lamenta Rigoberta Menchú Magdalena Ávila miércoles, 11 de noviembre de 2009 El problema de Oaxaca es la impunidad, lamentó aquí la indígena guatemalteca Rigoberta Menchú Tum, Premio Nobel de la Paz, de visita por pueblos y ciudades del subcontinente para promover la democracia en América Latina. Consultada sobre el conflicto sociopolítico vivido en la entidad durante la segunda mitad del 2006 y parte del 2007, opinó que "el tema de la impunidad es el problema que más nos ha hecho daño". Y es que, lamentó, "lo que realmente han impartido las instituciones de justicia es injusticia, ya que las personas vulnerables son las que siempre han sido golpeadas duramente". Consideró que para solucionar este problema debe fortalecerse el diálogo y el cumplimiento de los acuerdos que se hayan tomado, "porque en la medida en que ya no hay presión se dejan de cumplir", por lo que "es importante constituirse como observadores de ese cumplimiento de acuerdos". En conferencia de prensa, Menchú Tum reconoció que Oaxaca es una región de importancia estratégica para México. "Aquí está la mayor cantidad de recursos naturales y energéticos, y Oaxaca tiene una gran oportunidad de desarrollar una economía exitosa que tenga que ver con la gente misma, apoyada en programas auto sostenibles". Reveló que en este tema la Fundación Menchú en México está seleccionando cinco comunidades de Oaxaca para impulsar y fortalecer un trabajo comunitario, sobre todo las que son exitosas en la defensa de la naturaleza, por lo que están en consulta con varias organizaciones oaxaqueñas sobre el caso. La ONU está en decadencia En otro tema, Rigoberta Menchú afirmó que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) está en decadencia porque "muchos de sus países miembros son destacados violadores de derechos humanos, en tanto que otras naciones tienen su propia dinámica y no están usando exactamente la normatividad internacional". Opinó que debe darse una reformulación en el quehacer internacional. Asimismo, señaló que el caso de Honduras "nos dejó muy claro que a pesar de que haya unanimidad en la OEA y ONU para rechazar el golpe de Estado, esa unanimidad llegó a un límite y el límite es exactamente lo que estoy diciendo: todos están en contra, pero no hay manera de ejecutar esta decisión". Acusó que el gobierno de facto de Honduras ha estado por encima de cualquier regla, tratado y convenido entre los países de la región. Micheletti, el nuevo dictador de Centroamérica "Micheletti es el nuevo dictador de Centroamérica", sentenció la indígena guatemalteca, y lamentó que los países no puedan cambiarlo porque no tienen forma de ejecutar de manera coercitiva una resolución. "No hay un órgano que ejecute, al menos que funcionara el Tribunal Penal Internacional; muchos ciudadanos acudirían a él, pero no puede reaccionar en relación con Honduras, a pesar de que llena todos los requisitos. Aquí se ve claramente un límite de la acción internacional", indicó. Lamentó, igualmente, que no se cumplan casi la totalidad de las resoluciones de las Naciones Unidas sobre el hambre, la trata de personas y delitos de lesa humanidad como genocidio, etnocidios, desapariciones forzadas y temas muy concretos como los derechos civiles y políticos de los ciudadanos del mundo. "Todas estas resoluciones de la ONU no se cumplen porque depende de la voluntad política del país si las cumple o no; tampoco hay una manera de exigir al país que la cumpla", dijo. Afirmó que se trata de resoluciones fabricadas por expertos, por consultores, que toda la vida han estudiado datos estadísticos pero no conocen una sola comunidad, un sólo resultado de campo; tienen una imaginación del desarrollo bastante integral, pero en la práctica, cuando se intenta poner en marcha, se requiere de presupuesto, voluntad política del alcalde, del gobernador, pero también el acompañamiento y voluntad política de los diputados. "Entonces ya no mueve la parte nacional, entonces se queda como un llamado muy romántico lejos de la realidad. Yo digo esto porque estuve muchos años en la ONU, y creo que muchas de las resoluciones que se han tomado sobre tierra, territorio y recursos naturales, no se han cumplido, en tanto el deterioro es inmenso, porque la gente quiere comer también, quiere trabajo, quiere oportunidades, entonces se choca entre esos grandes abismos de analizar y resolver la problemática". La humanidad va en decadencia La Premio Nobel de la Paz habló también de la crisis económica mundial y de la crisis de las instituciones y la decadencia de la humanidad. Es el fin de una era y el inicio de otra como lo plasmaran los antepasados en el calendario Maya, sostuvo Rigoberta Menchú. Refirió que el cambio climático no sólo ha representado la turbulencia de huracanes, de desastres, sino lo más grave es que incrementará el hambre porque afectará la producción de alimentos en los campos. Todo, aunado a la crisis institucional y de la política. "Se ve que hay bastante perversidad en campañas electorales, muchas de ellas se ganan con bastante dinero; no hay un control del crimen organizado ni de la corrupción. Todo esto es parte de una decadencia que obliga a los humanos a mirar en su pasado y a encontrar nuevos caminos", subrayó. La conferencia de prensa de la guatemalteca fue previo a su participación en el quinto Congreso Genes (Generación Esperanza) organizado por la Universidad Anáhuac.