LA DIVERSIDAD SEXUAL EN OAXACA

Foto de una Marcha de grupos gay,lesbico, transexual,bisexual,travesti en Oaxaca por la diversidad sexual, junio 2009

Propuso APPO, desde el 2006, el matrimonio entre hombres y mujeres del mismo genero Misael Sánchez La propuesta para establecer en Oaxaca el matrimonio como la unión entre 2 personas –sin especificar que éste debe ser entre un hombre y una mujer— la realizó por primera vez la APPO en el 2006. En un foro para reformar la Constitución local en el mes de agosto de 2006, los integrantes de la Asamblea Popular del Pueblo de Oaxaca manifestaron que era urgente que en la tierra de Benito Juárez se instrumentaran “políticas de inclusión y respeto a la diversidad”. Así, la APPO propuso que se aprobara una “Ley de Convivencia” para que Oaxaca fuera la primera entidad de la República Mexicana que permitiera el matrimonio entre homosexuales “porque las parejas del mismo sexo deben tener derechos similares a las heterosexuales”. En las conclusiones del “Foro Nacional Construyendo la Democracia y la Gobernabilidad en el que participó el Arzobispo de Chiapas, Samuel Ruiz y el presbítero Bernardo Murcia, entre otros, plantearon “promover foros y leyes que protejan los derechos de personas con diferentes preferencias sexuales sobre los temas que conciernen a su problemáticas”. Se pronunciaron porque “las autoridades aprueben la Ley de Convivencia presentada por los distintos grupos, para que las parejas del mismo sexo tengan derechos similares a las heterosexuales”. A esta proposición sumaba otra para que se establezca en la constitución el reconocimiento de los derechos humanos de las mujeres indígenas, de los niños y de todas las minorías. Y es que de acuerdo con la propuesta de la Asamblea Popular, Oaxaca debe tener una Constitución que debe garantizar la no discriminación, por origen étnico, opción sexual, religión o por facultades físicas diferentes. Además, debe incluir a las mujeres en todos los ámbitos en la toma de decisiones, el reconocimiento jurídico de los pueblos originarios y sus derechos entre ellos el uso de la lengua indígena y aceptar los acuerdos de San Andrés Larráizar, además de que se elaboren leyes con la palabra de los pueblos indios y con mecanismos de consulta que garanticen su participación.