EL SECRETO A VOCES EN LA MUERTE DE COLOSIO

-Fueron priístas los que planearon el asesinato de Colosio; Murat entre los señalados

-Se desvanece legado trasformador de Colosio a 15 años de su asesinado

Fueron priístas los que planearon el asesinato de Colosio; Murat entre los señalados ISMAEL RIVERA Domingo 22 de Marzo de 2009 22:59 José Murat, coordinador del acto ordenó que el templete fuera reinstalado en lo más profundo de Lomas Taurinas. En 1994 se vivía un caldeado proceso electoral derivado de los discursos que proponían una profunda trasformación del estado mexicano; exasperado por ser el principal aspirante para sustituir al Presidente Carlos Salinas de Gortari, el candidato del tricolor, Luis Donaldo Colosio Murrieta, resultó flaqueado por un asesino “solitario”. En los días subsecuentes la teoría del complot tomó fuerza, José Murat Casab fue entonces señalado como uno de los principales operadores y orquestadores del magnicidio. Fueron los mismos priístas quienes lo llevaron hasta Lomas Taurinas en Tijuana, Baja California. Fueron los priístas quienes planearon el evento y fueron priístas quiénes lo cuidaban, denunciaron a la prensa líderes de opinión y políticos, simpatizantes o no de Colosio. El propio fiscal Pablo Chapa Bezanilla “se aferra a su idea” de implicar a miembros del Estado Mayor Presidencial en el complot para asesinar a Luis Donaldo. La PGR enfiló sus baterías hacia el general Domiro García Reyes y el coronel Federico Antonio Reynaldos del Pozo. En su defensa, el general alegó que no estuvo al tanto de los preparativos del mitin en Tijuana y responsabilizó del “desorden y del cambio del templete” al coronel Reynaldos del Pozo, a José Murat Casab, Mario Luis Fuentes y Jorge Schiaffino. Considerado como un de los hombres más cercanos a Roberto Madrazo Pintado; José Mutar subió como espuma tras la muerte del sonorense, borrando incluso de la lista para candidata a senadora a Irma Piñeiro Arias, actualmente compañera de Casab en la LX Legislatura del Congreso de la Unión, quien luego de desertar de las filas priístas arribó en el 2006 a San Lázaro bajo las siglas del Partido Nueva Alianza (Panal), franquicia electoral propiedad de la lidereza vitalicia magisterial Elba Esther Gordillo Morales. Unos años más tarde, en 1998, el ex mandatario Ernesto Zedillo Ponce de León, (ex coordinador general de la campaña de Luis Donaldo Colosillo y quien los sustituyera en la contienda cuatro años atrás), favoreció a Murat como candidato a la gobernatura de Oaxaca, eliminado del camino a José Antonio Estefan Garfias, actualmente Secretario de Administración del gobierno ulisista y que en su momento se consideraba virtual candidato que sucedería a Diodoro Carrasco Altamirano. Sin embrago, luego de 15 años que contemplaron la creación de una Fiscalía Especial que tuvo tres directores hasta la creación de la Subprocuraduría Especial, por donde desfilaron un sin número de titulares del organismo investigador encargado del caso, la investigación no fue sustancialmente más allá de donde llegó los primeros días después del asesinato. Asimismo, quedó en el olvido los 172 tomos de evidencias acumuladas -79 mil 319 fojas- incluyendo las 1,122 declaraciones recabadas, 438 ampliaciones de declaración, 440 solicitudes de información a diversas dependencias, 598 investigaciones de la Policía Judicial Federal, 276 dictámenes periciales (45 en criminalística, 35 en audio y video, 10 en lenguaje de sordomudos, seis en medicina forense, uno en grafoscopía, uno en ingeniería civil, uno en informática, uno en astronomía, tres en balística, dos en grafología, dos en traducción y uno en foniatría); para determinar que Mario Aburto Martínez, presunto homicida de Colosio actuó solo. No obstante a Chapa Bezanilla, desde 1996, sostuvo que una de las piezas claves en el caso era el coronel Antonio Reynados del Pozo, porque éste habría aceptado el cambio de ubicación del templete en Lomas Taurinas, por lo que tendría que responder ante las autoridades para desentrañar y darle sustento a la versión del complot, y porque tras el certero crimen, fue asignado a la seguridad personal de Raúl Salinas de Gortari. Tras la detención de este último, el general Roberto Miranda, jefe del Estado Mayor Presidencial, integró a del Pozo a su grupo de colaboradores, por ordenes superiores. Se desvanece legado trasformador de Colosio a 15 años de su asesinado ISMAEL RIVERA Domingo 22 de Marzo de 2009 23:04 El ex candidato a la Presidencia de México fue ultimado de dos balazos, en el barrio de Lomas Taurinas de Tijuana, Baja California. A 15 años de su homicidio, el legado trasformador del ex candidato del PRI a la Presidencia de la República, Luis Donaldo Colosio Murrieta; se carcome por el tiempo. En Oaxaca sigue imperando la corrupción, el cacicazgo, la impunidad y la pobreza que vislumbraba desde entonces el sonorense, como cáncer inextirpable; herencia de un sistema que logro sostenerse a pesar de los disturbios -que cobraron la vida de al menos 24 personas- en 2006. Ayer, el parque infantil que lleva su nombre, ubicado en la Agencia de San Felipe del Agua, lució semidesierto en el preámbulo de su deceso, ataviado por el pasto seco. De acuerdo al vigilante del lugar, el sábado 14 de marzo, un grupo de priístas, infirmó, arribaron en seis camiones de la empresa de autotransportes “Sertexa” encabezados por un representante del gobierno del estado, depositaron una ofrenda florar frente al busto de éste y se retiraron después de 15 minutos, lapso que duró el acto solemne, mientras tanto el tributo se mantiene hoy a la espera de ser recogido por el camión de la basura. El sello que Luis Donaldo imprimió en cada uno de sus discursos y que dicen fue su cláusula de muerte, particularmente el pronunciado durante el acto conmemorativo del LXV aniversario del PRI en el Monumento a la Revolución el 6 de marzo de ese mismo año cuatro días antes de su onomástico número 44 y, que parece haber sido olvidado en las mentes de los gobernantes de extracción priísta. Era, entonces, el establecimiento mismo de una nueva etapa para México, donde el equilibro gubernamental tendría que ser conquistado por un “poder ciudadano”, profirió en aquella ocasión Colosio Murrieta al declamar: “Es la hora de reformar el poder, de construir un nuevo equilibrio en la vida de la República. Es la hora del poder del ciudadano. Es la hora de la democracia en México”, en franco reto al sistema corrupto que gobernaba –como hoy- el país. “Es la hora”, dijo, “de hacer de la buena aplicación de la justicia el gran instrumento para combatir el cacicazgo, para combatir los feudos de poder y el abandono de nuestras comunidades, (es decir abolir el régimen político-judicial). “Es la hora de cerrarle el paso al influyentismo, a la corrupción y a la impunidad. El gran reclamo de México es la democracia; el país quiere ejercerla a cabalidad ¡México exige. Nosotros responderemos!”. Pero sin duda la parte crucial que se enquistó como un peligro para ese engranaje de encubrimientos fue cuando dijo: “Yo veo un México con hambre y con sed de justicia, un México de gente agraviada, de gente agraviada por las distorsiones que imponen a la Ley quienes debería de servirla, de mujeres y hombres afligidos por el abuso de las autoridades o por la arrogancia de las oficinas gubernamentales…”. Luego de 15 años, el espíritu de esos postulados continúa vigente. Sin embargo, a decir de los trabajadores del “Parque Deportivo Luis Donaldo Colosio Murrieta”, no se tienen contemplado ningún acto por parte de la “Fundación Colosio u otras instancia de gobierno en este lugar, lo que hace suponer que las actuales contiendas tienen acaparada la atención tanto de los priístas como de la clase política en general.