LAS VOCALES

LAS VOCALES. Ausencia Gómez. A. En curso el proceso de renovación sindical de la Sección XXII del magisterio, por medio de algunos encabezados de la prensa y por la radio, gacetilleros y merolicos al servicio del poder, pretenden confundir a la opinión pública y maestros bisoños. “Informan” de divisiones, conflictos y antropofagia en la lucha por los puestos a la nueva dirigencia sindical. Por supuesto, son ajenos e ignaros de las características de un proceso que pretende, mediante cuidadosa selección y depuración, evitar que oportunistas, traidores y agentes policíacos encubiertos, alcancen algún puesto sindical. Cierto, un proceso democrático no está exento de conflictos, pugnas y confrontaciones, sólo el dedazo es terso y la voluntad “divina” se acata ruidosa o silenciosamente, basta observar a la Legislatura estatal. E. Por lo que nos platican sindicalistas de base, la polémica, desde las asambleas sindicales y sectoriales ha sido fuerte y definitoria de posiciones político sindicales. En el marco de ellas han sido descubiertos varios priístas embozados y oportunistas colaboradores con el poder, mediante la exhibición de evidencias de parte de los maestros. Estas acciones son lo que merolicos llaman “división” y descalifican. El asunto es que las estrategias del poder corporativo nacional y del poder caciquil local, se han topado con un magisterio vigilante e intransigente con los principios rectores del movimiento democrático magisterial. Vigilancia que deberá prolongarse hasta la culminación del proceso para evitar sorpresas, como en los casos de la Sección IX del D. F. y Chiapas. I. Por cierto, una de las tareas incumplidas de parte de las dirigencias seccionales y del magisterio en su conjunto lo es la propuesta de lo que en su momento llamaron “Educación Alternativa” y cuyos frutos aún no se ven por ningún lado. Una propuesta de educación que constituya realmente a la oficial tradicional no sólo es hacer la diferencia ante un modelo que va de fracaso en fracaso a la luz de los resultados, también significa obtener legitimidad social. No basta con oponerse y desenmascarar los pactos del poder político con el poder corporativo sindical como la llamada “Alianza por la Calidad de la Educación”. No basta pero es el primer paso que hay que dar. Es urgente para el magisterio oaxaqueño plantear a la sociedad y padres de familia una educación diferente en su filosofía, propósitos, prácticas y resultados. O. Ha llegado el momento de hacer realidad la educación alternativa, una añeja aspiración del magisterio democrático oaxaqueño, lo cual significa tomar medidas inmediatas. La actual escuela portadora de una imagen social diseñada desde el poder no es democrática, entonces hagamos la imagen de la escuela democrática. Si la escuela no es democrática, entonces los maestros en su interior tampoco lo son; auque porten pancartas y griten consignas. Convirtámonos en maestros democráticos al interior de nuestras escuelas, eso es congruencia. Otra línea de trabajo al alcance e inmediata, consiste en recuperar las experiencias exitosas de educación alternativa puestas ya en práctica. Ahí están los preescolares Montessori; las escuelas primarias que impulsan la metodología de Freinet; ahí están las secundarias con el proyecto de ciencias; ahí están las secundarias comunitarias. U. Un modelo de educación alternativa real no tiene su génesis en los escritorios y pretender su construcción por parte de un equipo de especialistas tardará otros 28 años. En cambio, un modelo alternativo exitoso puede surgir desde la base, transformar el aula y transformar la escuela, esa es la tarea inmediata. Requiere sí, de un cambio de actitud de parte del magisterio, requiere sacudirse la aceptación acrítica de “Programas y Proyectos” impuestos por el centralismo burocrático de la SEP y sus operadores. Requiere de congruencia entre nuestro discurso y nuestra práctica, dejando atrás los símbolos, íconos y ritos que caracterizan a la escuela actual, propios de las administradas por particulares, legionarios de Cristo, por ejemplo. Empecemos la tarea.