ESTAR AL PENDIENTES DEL PLAN PUEBLA PANAMA

El Sendero del Jaguar, por la regeneración de nuestra memoria. Sebastián Espina Martínez OAXACA LIBRE Jueves, 26 de junio de 2008 Encuentro de Jóvenes en el Movimiento Social “Es un privilegio ser joven en tiempos de Revolución”, reza una expresión coloquial atribuida al comandante Fidel Castro en la isla caribeña; y, efectivamente, los jóvenes que participamos de manera activa en el movimiento social que devolvió la conciencia y la memoria al pueblo oaxaqueño, nos sentimos privilegiados de formar parte de esta lucha histórica. Durante el movimiento social los jóvenes mostramos voluntad de cambio y nuestra conciencia creció como la milpa ante un mundo avasallado por el neoliberalismo y la globalización. Oaxaca se volvió a nuestros ojos como ese microcosmos espejo de la represión institucionalizada, de la injusticia social, de la desigualdad y pobreza económica. Pero a su vez, nuestro estado fue también reflejo de las luchas por la resistencia y autonomía de distintos pueblos y comunidades que fueron cobrando visibilidad dentro del gran rompecabezas político. El 2006 fue un magnífico síntoma de la crisis de la transición, entre lo viejo que muere y lo nuevo que nace. Ese año nos permitió abrir los ojos para comprender la necesidad de descentralizar la lucha y el movimiento, para darnos cuenta que el movimiento no sólo se manifestaba a la ciudad, y para aprender de otras experiencias comunitarias que florecen en nuestro estado. Esta reflexión dio origen a las “caravanas de acompañamiento y observación de derechos humanos”, que realizamos jóvenes del movimiento social, a diversas comunidades oaxaqueñas minadas por problemas políticos. Durante la primavera de 2008, nos propusimos hacer un recorrido por la región del istmo de Oaxaca, para constatar esa doble situación de dominación y resistencia por la que atraviesan nuestros pueblos. El Istmo es una de las regiones mas asediadas, política y económicamente, por su ubicación geoestratégica, al ser la zona mas estrecha del país. La parte mas angosta separa un océano del otro por tan solo 200 kilómetros de distancia. Es en esta región donde tendrá mayores impactos el proyecto de “desarrollo” conocido como Plan Puebla – Panamá. Jalapa del Marqués, Tehuantepec, Juchitán y la selva de los Chimalapas, fueron algunas de las comunidades y municipios que vistamos, con el propósito de mantener reuniones informativas, realizar talleres de tecnologías alternativas y generar reflexión política en las comunidades. En este recorrido aprendimos que la lucha se hace abriendo caminos de esperanza. La lucha se hace escuchando a la gente en sus conflictos y sus anhelos. Aprendimos nosotros más de las comunidades en su lucha por la defensa de su territorio y en su valentía por impulsar proyectos autonómicos. En esta travesía tomamos como símbolo de la caravana al Jaguar, que en la tradición indígena es el protector de la tierra y el guardián de la luz. Pero también tomamos esta figura por su imagen salvaje y rebelde: animal de la noche y que como la noche es la antesala de la luz del día. A partir de esta caravana, que ha marcado nuestras vidas y compromiso, el Jaguar guía nuestros pasos de un camino que apenas comienza. Finalmente, queremos hacer énfasis en que las transformaciones que se quieren, no tienen por fuerza que esperarse desde "arriba" o desde el "centro", sino que las podemos realizar en nuestra práctica cotidiana y que entonces, nosotros y nosotras debemos ser el cambio que esperamos. Nosotros y nosotras debemos ser la Revolución, ejerciendo, fortaleciendo y construyendo nuestra Autonomía.